¿Cuáles son los principales objetivos y prioridades de la Asociación Provincial de Transportes de Vehículos por Carretera?
Somos una asociación provincial de transporte de vehículos por carretera integrados en la Federación Transcalit, motivo por el cual nuestros objetivos son los mismos que los de cualquier empresa de transporte, pero representando los intereses de este segmento especializado.
Los problemas que podamos tener son muy parecidos a los del sector como, por ejemplo, las relaciones con la Administración o las restricciones de tráfico.
Pero como nuestra actividad no se limita al propio transporte de vehículos, sino que las empresas desarrollamos otras actividades logísticas, como el almacenaje o la puesta a punto de los vehículos, podemos decir que también tenemos otras necesidades más concretas relacionadas con la calidad de servicio que se focaliza en las tareas logísticas que desempeña el conductor en la manipulación, traslado y almacenamiento de cada vehículo.
Aunque ahora se empieza a notar una cierta recuperación, España ha sufrido durante los últimos años, especialmente en el período de la pandemia, una importante bajada de la producción y exportación de vehículos ¿Cómo les afectó este hecho y cuál es la situación actual?
Durante la pandemia, nuestra actividad de transporte cesó totalmente, pero conseguimos subsistir gracias a los ingresos que nos proporcionó el almacenamiento de los vehículos que teníamos en nuestras campas, que es otra de nuestras actividades, así como las ayudas de la Administración, los ERTES y PERTES, o la posibilidad de conseguir Créditos ICO, etc.
Afortunadamente, a partir de la segunda mitad del 2022, la situación empezó a cambiar y podemos decir que hasta ahora hemos tenido unos buenos índices de actividad.
Aunque no se produce ni exporta el mismo volumen de vehículos que antes de la pandemia, y a pesar de la falta de conductores que sufrimos, en nuestro segmento de actividad, ha disminuido la competencia y la oferta actual de transporte, entre empresas y autónomos, puede cubrir la demanda de servicios de los fabricantes.
Además, esta menor competencia en el sector nos ha permitido incrementar algo los precios y, de esta forma, poder seguir sobreviviendo aun transportando menos coches.
Una de las principales dificultades que tiene el sector del transporte terrestre es la falta de conductores, ¿cómo afecta esto al sector de portavehículos?
Por las características de los portavehículos, y ante la falta de conductores que tiene todo el sector, nuestra actividad se ve más afectada porque los transportistas tienen también que cargar y descargar los vehículos del camión, estando autorizados para ello. Tienen que hacerlo porque los clientes así lo quieren y tienen que estar adecuada y específicamente formados, motivo por el cual nos cuesta todavía más encontrar conductores capacitados.
Además, la práctica totalidad de los camiones que utilizamos son ‘trenes de carretera’, es decir, camión más remolque con una longitud de 21,25 metros y 4,5 metros de altura para poder llevar el máximo número de coches. Para conducir estos camiones se requiere el carné de conducir C1 E y pocos conductores lo tienen.
De todas formas, el sector del transporte de portavehículos vamos consiguiendo salvar esta situación de falta de conductores gracias a la contratación de transportistas autónomos especializados en esta actividad, pero la verdad es que ellos han sufrido mucho la época de la pandemia, habiendo desaparecido muchos de ellos y, actualmente, también harían falta más.
Relacionado con esto, es conveniente destacar que las empresas dedicadas al transporte de vehículos afrontamos otro problema que es la espera, de entre dos y tres años, para poder adquirir un nuevo portavehículos. Los fabricantes no producen al ritmo que necesitamos para renovar nuestras flotas o para que puedan entrar nuevos transportistas en esta actividad.
Recientemente, la Comisión Europea ha presentado su propuesta de revisión de la Directiva de pesos y dimensiones en el transporte por carretera. Parece ser que se permitirán las 44 toneladas en toda la Unión Europea, así como el tráfico transfronterizo de los vehículos eurocamiones de 25,25 metros ¿Cuál es su opinión al respecto? ¿Cree que se conseguirá armonizar esta normativa de pesos y dimensiones en todos los países europeos?
Siempre hemos reivindicado que la Unión Europea necesitaba una armonización en cuanto a pesos y dimensiones porque es absurdo que en España podamos circular con longitudes de 21,25 metros, incluso de hasta 25,25 metros, y alturas de 4,5 metros, pero no lo podamos hacer por Francia o Portugal, que son nuestros países vecinos.
El caso de las 44 toneladas no afecta tanto a los portavehículos porque no se trata de un transporte pesado sino de un transporte voluminoso.
Pero lo que sí nos interesa es que los vehículos de 25,25 metros de longitud y 4,5 metros de altura puedan circular por toda Europa y traspasar fronteras sin ser sancionados. Por esta razón, queremos pensar que se armonizarán estas normativas en todos los países de la Unión Europea porque, entre otras cosas, poder transportar más mercancía o coches en un camión contamina menos y contribuye a la descarbonización de la actividad del transporte. Además, se necesitan menos conductores para la misma productividad y disminuye el número de camiones circulando por las carreteras.
El hecho de poder transportar más mercancía con camiones más grandes o largos, ¿podría generar algún tipo de problema?
El único problema que le vemos al hecho de poder transportar más toneladas de mercancías o más coches en un camión es que los clientes o cargadores se acostumbren y quieran pagar lo mismo que pagaban por los servicios de transporte con camiones más pequeños.
Si se transportan más toneladas o más vehículos, el precio tiene que ser algo superior porque también tenemos más costes en, por ejemplo, la compra de vehículos nuevos más caros, la sustitución de más ruedas, así como el incremento de los tiempos de trabajo por tener que circular a velocidades más lentas o tardar más en cargar y descargar el camión o el portavehículos.
¿Cómo ve el futuro del sector del transporte de vehículos en materia de descarbonización y lograr las cero emisiones y, especialmente, en cuanto a su adaptación a los nuevos combustibles o a los nuevos tipos de vehículos?
Existe todavía mucha incertidumbre porque no sabemos cómo van a ser los camiones del futuro ni qué tecnologías o combustibles van a utilizar o el coste que van a tener, que ya apuntan que serán mayores. No sabemos qué va a ser mejor, si un camión eléctrico, uno de hidrógeno o cualquier otro que pueda aparecer en el mercado. Los fabricantes avanzan, pero no al ritmo que exigen las autoridades europeas para descarbonizar la actividad del transporte de mercancías por carretera. A todo ello se suma que actualmente ya faltan infraestructuras de recarga y repostaje para la creciente demanda de vehículos eléctricos que circulan por las carreteras.
Y se generará un problema del que todavía no se habla demasiado: ¿cómo se reciclaran las baterías de los camiones eléctricos y qué coste tendrá?
Hay que hacer muchas inversiones y las empresas de transporte también tendremos que invertir en nuevos vehículos y combustibles, pero será justo e imprescindible que podamos repercutir estos mayores costes a los clientes para garantizar nuestra actividad, que es esencial para el desarrollo del comercio y la economía de cualquier país.
Y respecto al incremento de la intermodalidad en el transporte de vehículos como medida de descarbonización del sector, ¿qué puede decirnos?
Sin duda alguna, el sector del transporte de vehículos por carretera es uno de los eslabones de la cadena logística que más contribuye a las operaciones intermodales. El mayor volumen de transporte de vehículos se hace en barco o bien en tren, motivo por el cual, los operadores de portavehículos se ocupan de la última milla, es decir, del transporte entre factoría y puerto o terminal ferroviaria en origen, o el transporte entre puerto o terminal ferroviaria hasta el destino final, que podría ser un concesionario.
En este sentido, podemos afirmar que el transporte en portavehículos es un segmento muy multimodal y que, por tanto y en términos generales, contribuye a la descarbonización de la actividad de transporte.